
Estas afecciones son más propensas a desarrollarse en quienes tienen antecedentes familiares de enfermedades a la tiroides, como también aquellas mujeres que presentan problemas de fertilidad, alteraciones a su período menstrual, repentinos cambios de peso, entre otras señales que podrían ayudar a la detección temprana de alguna patología y tratarla con anticipación.
Fuente: Elmostrador.cl